martes, julio 05, 2005

17.¿Se vive bien en Japón?

La naturaleza genera más autosatisfacción entre los estudiantes japoneses. Foto JJuste
Jordi Juste para Nipoweb
Tranquilos, no voy a aprovechar esta sección para hacer una reflexión de carácter general sobre el tema. La pregunta que encabeza este artículo se la hice recientemente a mis alumnos para que reflexionaran sobre el lugar donde viven y para que aprendieran a valorar sus ventajas y sus inconvenientes. El resultado del trabajo era una pequeña composición de unas doscientas palabras que culminaba un par de semanas en las que en clase habíamos estado viendo vocabulario y formas lingüísticas útiles para referirse a la calidad de vida.
Alto grado de satisfacción
Pues bien, las redacciones de los estudiantes universitarios japoneses de tercer curso denotan un alto grado de satisfacción con la realidad en la que las ha tocado en suerte nacer y crecer. Su valoración no es acrítica, muchos reconocen que Japón tiene graves problemas, como el paro creciente, la contaminación o la falta de espacio. Sin embargo, casi todos consideran mucho más abundantes los factores positivos.
Entre estos destacan las condiciones materiales, en concreto la ausencia de extrema pobreza, la presencia de buenos sistemas de educación y sanidad y, por encima de todo, la seguridad ciudadana. Es curioso, ya que el escaso índice de delincuencia podría hacer pensar que los japoneses no aprecian la falta de delitos en su justa medida, pero no es así, tal vez debido a que muchos tienen la experiencia, directa o relatada, de salir del país y ser víctimas de robos.
La naturaleza, uno de los factores más nombrados
Otro factor que estiman en gran medida es el clima y, en general, la naturaleza. También esto puede ser una sorpresa para los muchos extranjeros que se quejan de los fríos inviernos y de los sofocantes veranos. Lo curioso es que los japoneses también se quejan a menudo del severo tiempo, pero al mismo tiempo parece ser que lo tienen asumido y hasta lo aprecian. Yo creo que eso es consecuencia de una cultura que hace que aprendan desde la cuna a deleitarse con la naturaleza. Es un tópico que se ajusta a la realidad: si pueden, disfrutan de un agreste acantilado, de un frondoso bosque de arces o de una rebelde selva de bambú. Y si no pueden, se hacen un bonsai o un arreglo floral, o se tumban a contemplar un cerezo en flor, ajenos a la fealdad del plástico azul que les sirve de colchón o a los cables de alta tensión que coronan la blanquecina copa.
Digan lo que digan los que sólo ven la paja en el ojo de Japón, los japoneses creen que viven bien, o sea, viven bien, porque ¿qué es vivir bien sino estar razonablemente satisfecho con la propia realidad?

5 comentarios:

Angela María Arbeláez A. dijo...

Si estoy de acuerdo!!! luego escribire algo más.

Anónimo dijo...

No creo que exista el paraiso en la Tierra. Todo tiene sus aspectos positivos y negativos. Como en todo hay que averiguar si los pros superan a los contras, si es así bien, y si no buscar las condiciones para cambiarlo o buscar otro lugar donde sea así.

Anónimo dijo...

100% de acuerdo con Marcos.

Yo, personalmente, considero que la educación y la sanidad en Japón están en el espectro medio - medioalto. O sea, estan muy bien en comparación con según que países, pero no son punteras. En el tiempo que he pasado en Japón, los médicos que he tenido la ocasión de conocer, no me han inspirado demasiada confianza, y el nivel educativo de, por ejemplo, inglés, palidece al lado del de sus vecinos surcoreanos.

Saludos

Jordi Juste dijo...

Sólo quiero dejar anotado que a mí y a mi familia la sanidad japonesa nos ha ido muy bien, aunque sé que hay muchos problemas, algunos de los cuales he explicado en mis artículos en El Periódico.
En cuanto a la enseñanza, la escuela primaria a la que van mis hijos en Kioto me parece mucho mejor que la privada a la que fui yo en Barcelona.
Gracias por los comentarios.
Jordi Juste

Anónimo dijo...

Yo tampoco tuve quejas de la sanidad en los tres años que pasé allí. Lo que tuve la sensación es que no cuentan con servicios punteros, tal vez porque su desarrollo se produjo décadas antes que en España, de tal manera que lo que en España es totalmente nuevo aún, en Japón ya empieza a resultar obsoleto y con ganas de experimentar una renovación.

Bueno, y con lo que no estoy tan de acuerdo es con el hecho de que los japoneses estén tan contentos con su propia realidad. Si realmente fuera así, no se entendería el elevado número de suicidios que se producen en aquel país. Lo que me dio la sensación es que a veces vuelven la espalda a la realidad y no quieren ver las cosas como son. Hablaba Jordi de que los japoneses hacen hincapié en la falta de pobreza extrema en su país; y sin embargo a mí una de las cosas que más me impactó a poco de llegar a Japón fue ver la inmensa cantidad de indigentes que se pueden ver en las principales ciudades del país, y que en el caso de Osaka hacían legión en las inmediaciones del zoo de Tennoji. Y en Tokio, muchísimo más aún. Cuando esto se lo comentabas a los alumnos o a los amigos japoneses, siempre te decían: "¿Ah, sí? Pues nunca me he fijado".