viernes, abril 18, 2008

La actualidad del mundo hispánico en español

Hoy he tenido la primera clase real este año de un curso muy simple e interesante basado en presentaciones. Digo la primera clase real porque la anterior la dediqué a explicarles bien a los estudiantes la dinámica a seguir.
Los alumnos son de niveles intermedios.
Se trata de que cada uno prepare cada semana una pequeña presentación sobre una noticia del mundo hispánico. Tienen libertad para escoger el tema y usar la tecnología que deseen. En el aula disponemos de una pizarra, un televisor, un reproductor de dvd, conexión a Internet y un proyector de cuerpos opacos. Hoy 6 alumnos han usado sólo el proyector, mientras que uno ha usado su i-pod para reproducir un video.
Mientras un alumno presenta, el resto tiene que tomar notas en un papel, que me entregan al terminar la clase, y al final hacer preguntas.
Yo intervengo para corregir errores lingüísiticos muy reiterados o errores graves de contenido.
Hoy las noticias han sido: el nuevo gobierno de España con mayoría femenina, los rumores de traspaso de Ronaldinho, la retirada de Romario, el paso de la llama olímpica por Buenos Aires, los problemas que causa el calentamiento global en Perú, el proyecto de ley de reforma del sector energético mexicano y la detención de un turista en la isla de Pascua por romperle la oreja a un Moai.
Las calificaciones se basan tanto en la presentación como en la actitud en clase (toma de notas y preguntas).
El año pasado quedé muy satisfecho con el resultado de esta clase. Creo que mejora su habilidad de presentación, su capacidad lingüística en español y su conocimiento del mundo hispánico.
Claro que es optativa y los que vienen ya saben que tienen que trabajar un poco cada semana.
Con todo, como era de esperar, la mayoría han empezado con un nivel bastante pobre, con presentaciones que casi eran meras lecturas y en algunos casos con escasa preparación lingüísitica y casi nula previsión de las preguntas que podían hacerles sus compañeros. Pero ya ha habido alguna de nivel muy alto que seguro que servirá de acicate.
Es una de esas clases que esperas que llegue. ¿Qué más se puede pedir?

jueves, abril 03, 2008

Fin de contrato

La semana que viene comienza el curso universitario en Japón. Para mí es el último de los cinco de mi vigente contrato en Ritsumeikan, donde tienen la política de no renovar a nadie, lo haga bien o mejor. ¿Puedo añadir algo más?

miércoles, marzo 26, 2008

El Instituto Cervantes triunfa en Tokio

Noticia publicada originalmente en El Periódico de Catalunya
http://www.elperiodico.com/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAS&idnoticia_PK=489641&idseccio_PK=1007&h=
y colgada también en mi blog principal: http://japonjuste.blogspot.com/
El centro más grande del mundo ha superado ya las previsiones
Desde abril se impartirán clases de catalán
Tokio. Jordi Juste
En los cinco meses que lleva en Tokio, el Instituto Cervantes ha superado con creces las expectativas que tenía. Antes de abrir esperaba captar de entrada a unos 300 alumnos, atrajo a 800 para su primera prematricula y ahora ya va por el millar. A pesar de tener ya en pleno funcionamiento sus actividades principales, la sede del IC en Tokio no ha sido todavía inaugurada oficialmente. La ceremonia está prevista para noviembre, como parte de la visita de estado que realizarán los Reyes a Japón.
Sin inauguración oficial
La sede japonesa es la más grande del Cervantes en el mundo y está situada en una zona céntrica de la capital, donde además de dar clases de castellano se ofrecen otras actividades de difusión de la cultura española e hispanoamericana, como conferencias, cine y exposiciones. En estos momentos se puede ver la exposición “Extraños en el paraíso. Fotografía contemporánea en el País Vasco”. Además, desde abril se ofrecerán clases de catalán y, si hay demanda, de gallego y vasco.
“De momento hemos ido a lo fácil, a lo que ya hay, a la gente que ya tiene interés en lo español. Ahora intentaremos incorporar a gente que no ha tenido contacto. Ese es el objetivo. Queremos contextualizar el español y que los japoneses puedan enriquecer su vida cultural”, explica el director del centro, Víctor Ugarte.
La llegada del Instituto Cervantes a Tokio se produjo en septiembre de 2007 después de una década de repetidos rumores que anunciaban su inminente apertura y que finalmente quedaban siempre en nada. Una de las principales dificultades fue encontrar un espacio adecuado a precio asequible en el centro de Tokio, ciudad que cuenta con los alquileres más caros del mundo. Se llegó a pensar en ubicar la sede del Instituto en la embajda de España, pero se tuvo que desechar la idea por la imposibilidad de llevar a cabo actividades remuneradas, como los cursos de idiomas, en sedes diplomáticas.
Terreno abonado
Japón es un país donde una gran parte de la población dispone de una importante cantidad de dinero para gastar en actividades culturales. Además, la mayoría de los japoneses prefieren tener organizadas sus horas de ocio y no cuentan con segundas residencias donde pasar los fines de semanas o los períodos de vacaciones largos. A eso se añade una gran curiosidad por lo extranjero que alcanza también a lo español.
Sin embargo, contra lo que alguna gente cree, el castellano no está de moda en Japón, aunque sí es cierto que su estatus ha aumentado con respecto al de otras lenguas europeas, como el alemán o el francés, hasta hace poco las preferidas de buena parte de los intelectuales nipones. Al mayor interés por lo español contribuyeron decisivamente los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Liga de Fútbol Profesional, pero también el descubrimiento del modernismo, el flamenco, el cine y la cocina.
El castellano se estudia en unas 40 universidades, aunque en la mayoría de los casos como una segunda lengua extranjera que los alumnos tienen que cursar obligatoriamente. Además, numerosas academias privadas y la radio y televisión públicas ofrecen semanalmente cursos de español.
Sobre todo mujeres
El Instituto Cervantes ha logrado atraer a estudiantes de diversas edades y condiciones, pero el 70% son mujeres de entre 20 y 45 años. La mayoría de ellas estudian castellano porque les interesa algún aspecto de la cultura española o hispanoamericana, aunque también hay una minoría que espera usarlo en el trabajo. “Mi marido es empresario y a veces trabaja con clientes de España. Yo lo ayudo y por eso a veces tengo que hablar en español”, explica Keiko, una mujer de unos 40 años que lleva 5 meses estudiando, dos días por semana, en el Cervantes.
En cambio, su compañera Junko explica que estudia en el Instituto, junto a su esposo, por pura afición: “Me interesa la música de España desde que conocí a Vicente Amigo. Y también la comida y la gente”.
El Instituto Cervantes cuenta en Tokio con 28 profesores nativos a tiempo parcial provenientes de diversos países hispanohablantes, que en su mayoría ejercen también en alguna de las universidades de la capital. Todos aplican la metodología comunicativa contemplada en el plan curricular para todo el mundo, pero a veces se topan con la idiosincrasia local y tienen que convencer a alumnos poco acostumbrados a hablar con sus compañeros en una lengua extranjera.

domingo, enero 20, 2008

JAPÓN BAJA LA NOTA

A continuación reproduzco uno de mis artículos aparecidos en El Periódico de Catalunya por estar relacionado con la educación, aunque no especialmente con la enseñanza del español.

Foto: Un grupo de escolares frente a la estación de Kioto. JJuste

27/12/2007 DEBATE SOBRE LA CALIDAD DE LA EDUCACIÓN EN UN PAÍS ASIÁTICO
El informe PISA revela un descenso del nivel escolar nipón y aviva la polémica sobre los planes educativos
• El país sigue entre los primeros del mundo, pese al retroceso
JORDI JUSTE.KIOTO
La capacidad académica de los estudiantes japoneses desciende, aunque, en el conjunto mundial, siguen estando en el grupo de cabeza. Este podría ser un resumen de los resultados del recientemente publicado informe PISA para el año 2006, que analiza la capacidad académica de los estudiantes de bachillerato de 57 países, de los que 30 son miembros de la OCDE.
Yuzo Ueda, profesor de Ciencias en un instituto público de Ayabe, en una zona rural de la provincia de Kioto, opina: "El informe en sí no es preocupante, pero el nivel escolar básico está bajando. Hay que completar los conocimientos fundamentales. No digo que se meta a los niños en la cabeza una gran cantidad de conocimientos, sino que tienen que dominar la lectura, la escritura y el cálculo antes de poder aplicarlos".
Sextos en conocimiento científico, décimos en matemáticas y decimoquintos en lectura son unas clasificaciones que ya quisiera para sí España, que se sitúa en los puestos 31, 32 y 35, respectivamente.
Peor que en el 2003
Sin embrago, en Japón han avivado el debate sobre la educación porque los datos representan un retroceso respecto al informe del 2003. Ya entonces, el documento mostraba una caída en el nivel académico y el Gobierno decidió rectificar parcialmente su política de yutori kyoiku (educación holgada), que había recortado poco antes los contenidos mínimos de las enseñanzas obligatorias para aligerar la carga de unos estudiantes que se consideraban entre los más estresados del mundo.
"No se puede decir que la culpa sea del yutori kyoiku. El resultado no puede cambiar espectacularmente en solo tres años. Si se cambia el sistema cada tres años sí que empeorará. Cuando se opta por uno, se tiene que aplicar durante el tiempo suficiente para poder evaluar sus efectos", manifiesta Megumi Unoki, profesora universitaria de francés y madre de un alumno de bachillerato.
Por su parte, el profesor Ueda señala que la bajada del nivel académico no es responsabilidad exclusiva de la escuela: "En el apartado de conocimientos científicos, la posición de los países del norte de Europa ha mejorado porque ahí les preocupa mucho el medio ambiente. El interés y la actitud por los temas cotidianos influyen sobre los niños. Primero, los mayores tienen que tener interés en estas cosas, si no los niños no cambiarán".
Una opinión similar la expresa una maestra de lengua japonesa de un instituto privado: "El problema es grave y profundo. Hay que ocuparse de la educación de los niños en casa y en la sociedad. Hay que hacer que tengan consciencia de la necesidad y el placer de aprender. En cuanto a la clase de japonés, por ejemplo, no tienen suficiente capacidad para leer ni escribir y, además, no tienen interés en saber cosas nuevas".
Cuando se habla de la educación en Japón, rápidamente aparecen miembros de las generaciones que se educaron con semanas escolares de seis días afirmando que ahora la escuela es demasiado fácil. Muchos padres complementan lo que consideran una formación insuficiente mandando a sus hijos, por la tarde y los fines de semana, a los juku, escuelas de repaso. Pero estos centros, más que formarlos, los preparan en la habilidad de superar los exámenes de ingreso a universidades famosas, basados en la memorización y la automatización más que en la capacidad de razonamiento.
Cohesión de grupo
Un problema principal que refleja el informe PISA es que en Japón hay una gran diferencia entre los estudiantes muy malos y la media. Esto es consecuencia de un rasgo característico de la sociedad japonesa, que valora la cohesión del grupo por encima de la excelencia individual.Por eso, muchos alumnos malos van pasando curso sin tener el nivel necesario y pueden incluso llegar a licenciarse en alguna universidad prestigiosa si pasan por uno de sus institutos de bachillerato asociados, que prácticamente garantizan el acceso a la facultad, donde el nivel de exigencia mínimo suele ser muy bajo.
"Nosotros estamos aquí porque fuimos a la escuela afiliada, pero somos tontos, los inteligentes son aquellos de ahí", explicaba recientemente un alumno de español de una universidad privada en referencia a parte de sus compañeros, que accedieron después de superar un difícil examen de ingreso.