jueves, abril 19, 2007

23.Alumno invidente

El curso acaba de comenzar con un reto nuevo para mí: dar clase por primera vez a un grupo en el que se cuenta un chico invidente. El departamento de ayuda a los alumnos discapacitados de la Universidad Ritsumeikan ha preparado las cosas bastante bien, y semanas antes de la primera clase el alumno ya tenía el libro de texto (En Marcha 1) traducido al braile. Se ha tardado un poco más en encontrar a los ayudantes, alumnos de algún curso superior (tercero o cuarto) que se sientan con él y le van explicando lo que hace el profesor (por ejemplo si escribe algo en la pizarra).
De momento la cosa va más rodada de lo que esperaba, aunque tengo que confesar que ya hemos tenido tres clases y todavía tengo una sensación extraña, como de estarme preguntando todo el tiempo si estoy haciendo bien las cosas, teniendo en cuenta que tengo a un alumno tan especial. No digo que la experiencia sea fácil, pero por el momento creo que la gran motivación de este chico compensa las dificultades.